miércoles, 29 de octubre de 2008

La belleza del contraste



En la selva, luz, flora y viento participan en una lucha que crea uno de los más hermosos espectáculos visuales. Los rayos que logran penetrar el follaje mecido por el viento, se proyectan sobre el recinto selvático, protagonizando una danza de luces y sombras que hace de la selva mil selvas. En esos instantes, la lucha silenciosa y permanente de la vegetación por alimentarse de la energía solar, se transforma en un espectáculo veloz, intenso y fugaz. Como el jaguar, la selva es luz y sombra.

Recostado de lado en mi cama, me quitó los anteojos y veo a través de la ventana. Entonces mi discapacidad visual se convierte en la herramienta para ver otra batalla de luz. Frente a mi ventana, a unos 30 metros, se levanta una hilera de eucaliptos, no más de 15. La imagen precisa, en la que se distingue cada hoja, cada rama y cada tronco, es distorsionada por mis ojos, dando lugar a un juego de dos elementos: un denso manto verde y una multiplicidad de focos celestes. Desaparece la uniforme claridad del detalle, y aparece la unidad del contraste, de dos fuerzas que se abrazan, flora y sol.

martes, 28 de octubre de 2008

Noche de Folk en Rayuela

Jueves 30, 8 p.m.Noche de folk” en la hermosa voz de Mariana Echeverría "Nana" (además jazz, blues y soul).

lunes, 27 de octubre de 2008

Un árbol bosque

El Ficus Benghalensis (Baniano) es el más extenso de todos. De sus ramas prácticamente horizontales brotan raíces aéreas, que al llegar al suelo se engrosan convirtiéndose en troncos. Luego, de esas ramas nacen otras ramas que a su vez manan raíces, y así continúa el ciclo. Es un árbol de miles de raíces-troncos.



Arriba el Jardín Botánico de Calcuta, en él se encuentra este Baniano de más de 230 años que ocupa una extensión de 12.000 metros cuadrados.
A la derecha el
Ficus Benghalensis más grande del mundo, de acuerdo con los Guiness Records de 1989. Se encuentra en India, en las afueras de Kadiri, se llama Thimmamma Marrimanu. Su extensión es de 21.ooo metros cuadrados y tiene 550 años de existir.

jueves, 16 de octubre de 2008

El primer higuerón

Este hermoso higuerón se yergue en un parque cerca de la casa de mi abuela en El Alto de Guadalupe. Cuando era niño las visitas a mi abuela incluían obligatoriamente una caminata al parque. Allí, me trepaba e imaginaba que era un inmenso animal prehistórico que me transportaba por otros mundos.










La envergadura de sus ramas es cercana a los 50 metros, llegando a cubrir completamente el "play" genérico.

miércoles, 15 de octubre de 2008

A la lona

Apocalipsito. -viste la bolsa?

Santayana Tropical. -a la lona

Apocalipsito. -
que jodido!

Santayana Tropical. -no tiene gracia lo de la bolsa. sube y cae.

Apocalipsito. -sí, pero...

Santayana Tropical. -no tiene mucha ciencia, o cae o sube, mucho o poco; o nos vamos a la mierda, o no.
mejor la literatura

(Silencio)

martes, 14 de octubre de 2008

domingo, 12 de octubre de 2008

La ley de la selva

"Meditando sobre la deuda pública actual de Estados Unidos que el presidente Bush descarga sobre las nuevas generaciones en ese país ―diez mil doscientos sesenta y seis millones de millones―, se me ocurrió calcular el tiempo que tardaría un hombre para contar la deuda que aquél prácticamente ha duplicado en ocho años.
Suponiendo ocho horas de trabajo neto diario sin perder un segundo, al ritmo rápido de cien billetes de un dólar por minuto, 300 días de trabajo al año, un hombre tardaría setecientos diez mil millones de años para contar esa suma.
No encontré otra forma gráfica de imaginarme el volumen de esa suma de dinero que se menciona casi diariamente en estos días."


Fidel Castro

Artículo completo

He's an arab!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

sábado, 11 de octubre de 2008

La unificación de la oposición para el 2010

Por Walter Antillón

Escribo aquí lo que pienso de “la unificación de la oposición con vista a las elecciones de 2010”, con el objeto de aclarar mejor las cosas para mí mismo; y también para contribuir a la reflexión colectiva.
1. Hay algunos compañeros persuadidos de que la unidad de la oposición se logra convenciendo a los líderes de los partidos afines de que perderían las elecciones si se presentan cada uno por su cuenta. De acuerdo con dicha tesis, creen que deberíamos empezar por visitar a dichos líderes y conseguir su promesa de asistir o enviar sus representantes a la reunión del 27 de Octubre, confiando en que en esta reunión terminarán de convencerse.
2. Creo sin embargo -ojalá estuviera equivocado- que los principales líderes de la oposición, que cuentan o especulan con un relativamente grande caudal de votos y tienen “deuda política”, no estiman deseable ni útil exponer su status político ni los recursos financieros de su partido en una convención general; cuando saben que al final de cuentas, ante la amenaza del triunfo del neoliberalismo, los seguidores de los otros partidos de oposición terminarían por unírseles, al menos con el voto.
3. Además es un hecho innegable que muchos de los partidos pequeños se proponen como objetivo principal sacar uno o dos diputados y otros tantos munícipes; de modo que prefieren asignar los cargos dentro de casa (para amasar 'deuda política' y con miras al futuro) y no exponerse a la atomización que supondría una convención nacional.
4. Frente al ensueño de la unidad, ellos colocan la práctica de los resultados que la experiencia ha mostrado como posibles. Nunca sirvió de nada aferrarse a un ideal inasequible que casi siempre nos llevará, en los hechos, al resultado que queríamos evitar.
5. Pero nosotros, con nuestros sombreros de simples ciudadanos, no tenemos que caer en esa lógica partidaria; al contrario, debemos sobreponernos a ella y pensar en términos distintos; tal vez opuestos.
6. Estamos pensando en la unidad de la oposición con miras a las elecciones de 2010; pero también, más allá del 2010, estamos pensando en un gran movimiento patriótico que sea capaz de cambiar el equilibrio político de Costa Rica, para que el pueblo ejerza efectivamente la soberanía, delegando regularmente su poder en sus representantes libremente elegidos, pero vigilando constantemente los actos de ellos, e interviniendo en la conducción del Estado, en su condición de soberano, cuantas veces lo juzgare necesario. Estamos pensando así, y ese pensamiento es diferente o quizás incompatible con la 'economía electoralista' de algunos o muchos de los partidos políticos de oposición. Este proyecto a futuro debe desligarse de la coyuntura electoral del 2010, de modo que no lo afecten el triunfo ni la derrota en las urnas.
7. Si para el futuro precisamos de la unidad estratégica del pueblo, para el 2010 necesitamos de su unidad táctica, con las miras puestas en un objetivo puntual: LA DERROTA DEL NEOLIBERALISMO DEL GRUPO ARIAS Y ASOCIADOS. La derrota de otros neoliberalismos camuflados entre las filas de la oposición vendría después, cuando la práctica los deje al descubierto.
8. Por esa razón, para el 2010 necesitamos la unidad del pueblo como un ideal táctico eventualmente contrapuesto a los objetivos de los partidos de oposición. En consecuencia, no debemos intentar esa unidad de la mano con los partidos, junto a los partidos, sino frente y contra los partidos. No en el sentido de que debemos romper con ellos; pelearnos con ellos; sino en el sentido de tener claro que vamos a intentar una unidad violentando talvez sus cálculos, a contrapelo de sus expectativas de corto plazo.
9. Entonces, lo que es verdaderamente vital, urgente, impostergable para el objetivo que perseguimos es que nuestro grupo contacte todas sin excepción las organizaciones cívicas no partidarias (comités, sindicatos, agrupaciones de toda clase), para persuadirlas de que cumplan un sólo rol, muy concreto, frente a los partidos: exigirles que vayan unidos a las elecciones, en una coalición con candidaturas únicas para presidente, diputados y munícipes, y una plataforma ideológica y política común.
Lo demás es carpintería

jueves, 9 de octubre de 2008

Conversaciones sin puñales

Pensaba en el choteo, en su impacto en la discusión política y el diálogo en general, cuando una imagen que estaba bien enterrada en mi cabeza emergió. Es de una película de acción que vi en la infancia, en la que el protagonista tiene que atravesar un estrechísimo pasillo, cuyas paredes están cubiertas por navajas de afeitar. No recuerdo más de la película, que además debe ser bastante mala, pero la imagen sirve para una metáfora válida.
Establecer un diálogo en medio de un clima de choteo requiere de un esfuerzo similar al de atravesar ese pasillo, hay que meter la panza, contener la respiración y calcular bien cada movimiento. En el camino siempre habrán heridas, que por lo demás no son mortales. Pero sin duda, habrían más y mejores conversaciones si escucháramos a los otros sin dagas en la mano, esperando a destruir lo que dicen.
Al decir esto no imagino un contexto de conversación ideal en todo momento, sería artificioso e ingenuo. Siempre habrán antagonistas que quieran destruir, ese no es el problema. Lo lamentable es cuando quienes destruyen no son los antagonistas, sino los supuestos aliados. Cuando los integrantes de un grupo, sean amigos, familia o compañeros de comité, nos comportamos como enemigos.
Disentir y destruir son conductas muy distintas. La conversación es un ejercicio entre interlocutores distintos que se tratan como iguales. Los aliados, aún cuando disienten, ven en el otro un igual, una persona. Para los enemigos el otro no es igual nunca, es una no-persona, por ello nunca podrán conversar.
Y al terminar de escribir esto me doy cuenta que no hay nada nuevo, es uno de los principios fundamentales de la democracia. Sin embargo, pareciera muy lejano. ¿Cuántas veces hablaremos sin conversar?

martes, 7 de octubre de 2008

UNA NUEVA OPORTUNIDAD

"Allí donde crece el peligro
crece también la salvación."

Hölderlin

Hace un año esperábamos expectantes el desenlace del referéndum. Atrás quedaban volantes, marchas y debates, rastros de la lucha de un pueblo que se atrevió a soñarse diferente. Y aunque muchos esperábamos un resultado negativo, ante la violación de la tregua electoral, la injerencia extranjera y la millonaria ofensiva de banderas y transporte; eso no lo hizo menos doloroso.
La mañana siguiente es la más oscura y fría que yo recuerde. La decepción ocupó los espacios que antes colmaban la ilusión y la esperanza. Donde antes se discutía con pasión, ahora dominaba el silencio. Probablemente por la magnitud de nuestras expectativas, la pesadumbre nos ha impedido ver con claridad lo que logramos a pesar del resultado. Aunque son muchos los logros, acá me referiré sólo a uno, el que considero más valioso.
En la antigua Grecia, aquellos que no participaban en la vida pública eran llamados idiotés. Antes del proceso de referéndum, yo, como muchos de mi generación, pertenecía a esa categoría. Crecer en un mundo unipolar que se anunciaba sin alternativas y el desprestigio de la política, nos hicieron creer que no había nada que pudiéramos hacer, que la situación era inevitable.
Hay quienes creen que el referéndum fue un error, hay quienes creen que fue una derrota; yo pienso que fue una oportunidad, una oportunidad que supimos aprovechar. Gracias a la iniciativa de la Convergencia Patriótica, los costarricenses participamos en un proceso político que nos recordó que nuestra acción, más que nuestro voto, cuenta. Que la historia no se ha terminado, que un futuro no es inevitable y que nosotros podemos construir nuestro propio camino. El referéndum fue una oportunidad para revitalizar la vida política del país, y se logró. Prueba de ello es que hoy, los jóvenes seguimos aquí, participando en política.
Un año después, la Convergencia Patriótica nos vuelve a convocar para señalarnos una nueva oportunidad, la oportunidad de unificar esfuerzos de cara a las próximas elecciones. De superar los detalles que nos separan, y enfocarnos en los grandes temas que nos unen. Recordemos, que el esfuerzo unificado de tantos y tan diversos costarricenses fue la principal fortaleza del movimiento contra el TLC; o como dijo el ahora converso Kevin Casas en el memorándum: “de una alianza formidable”.
Esta oportunidad de marchar juntos a la próxima contienda electoral se enmarca en un contexto particular. El capitalismo de nuestros días sufre una crisis grave y profunda, el desenlace es desconocido, pero los pronósticos son reservados. La crisis aumenta la posibilidad de construir caminos alternativos, que reduzcan la rapaz concentración de la riqueza, detengan la destrucción del planeta y permitan la convivencia pacífica. Sin embargo, un mundo mejor no es una condición necesaria e inevitable de la crisis. Dependerá de lo que hagamos nosotros, los opositores del sistema que colapsa, que en este momento de peligro crezca la salvación.
Hoy más que ayer, la unidad es la fuerza que necesitamos para construir nuestro camino. El costo de la división es demasiado alto, en nuestros hombros recae la tarea de construir una alternativa costarricense.


Leído el 7 de octubre en la proclama por una coalición patriótica.